63% de las mujeres peruanas declara haber sufrido algún tipo de violencia por parte de su pareja, de acuerdo con la Endes 2018, publicada recientemente por el INEI. Programa Conjunto de las Naciones Unidas viene apoyando el trabajo multisectorial para prevenir la violencia contra la mujer y mejorar la atención a las sobrevivientes.

Autoridades y funcionarios de diversas entidades del Estado peruano se reunieron con especialistas nacionales y extranjeros para dialogar acerca de los avances y desafíos de los sectores en las políticas públicas para prevenir y atender la violencia contra la mujer, así como para mejorar la articulación de los servicios de salud y socio-legales para las sobrevivientes.

El foro “Fortaleciendo la Respuesta Multisectorial frente a la Violencia basada en Género” fue organizado por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) y el Ministerio de Salud (Minsa) en coordinación con el Programa Conjunto de las Naciones Unidas “Servicios Esenciales para Mujeres y Niñas Sometidas a Violencia”, liderado por UNFPA, OPS y el PNUD con el apoyo financiero del Gobierno de España y el Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde). 

Políticas públicas que sean realidad en el territorio

La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Gloria Montenegro, resaltó la importancia de implementar las políticas a nivel local e identificar experiencias de articulación de servicios dirigidos a sobrevivientes de violencia para replicar en otras regiones. Resaltó el caso del Centro de Atención Integral Santa Julia, el primer establecimiento que integra servicios de salud y sociales para atender casos de violencia de género, ubicado en la ciudad de Piura, que es apoyado por las Naciones Unidas.

“La política pública requiere ser abordada con autoridades subnacionales y adaptada a las realidades de provincias y localidades (....) Debemos asegurar recursos, capacidad técnica y asesoría”, remarcó durante su participación.

A su vez, la coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas, María del Carmen Sacasa, reafirmó el apoyo de las agencias de Naciones Unidas para potenciar este trabajo del Estado. Recordó además que el desarrollo sostenible solo podrá ser alcanzado cuando hombres y mujeres puedan acceder a los mismos derechos. “La verdadera inclusión pasa por garantizar una mejor calidad de vida y bienestar para que ninguna mujer sea dejada atrás”.

Consolidar servicios para enfrentar un problema generalizado

1 de cada 3 mujeres en las Américas sufre violencia por parte de su pareja, mencionó Rubén Mayorga, representante ai de OPS. “La violencia contra la mujer representa más del 2% de las causas de muerte. Es un problema de derechos humanos y de salud pública que afecta el desarrollo de los países”.

6 de cada 10 mujeres peruanas declaran haber sufrido violencia alguna vez en sus vidas por parte de sus parejas o ex parejas, recordó Markus Behrend, representante del UNFPA en el Perú. “Frente a ello, es necesario acelerar esfuerzos para que los servicios públicos se consoliden como espacios para la protección y la recuperación efectivos, y para garantizar acceso a justicia”.

El Perú ha logrado importantes avances normativos para combatir la violencia contra la mujer y herramientas de gestión cruciales, como protocolos interinstitucionales que facilitan el accionar coordinado entre distintos sectores y una atención más integral a las sobrevivientes de violencia. Estos avances fueron reconocidos por los especialistas.

“Perú cuenta con un marco legal sólido, pero aún se presentan dificultades para la implementación. Es necesario redoblar esfuerzos para la difusión y sensibilización, así como asegurar mayores recursos para garantizar una respuesta efectiva”, reflexionó Neus Bernabeu, asesora regional de la Oficina para América Latina y El Caribe del UNFPA.

Compromiso es de todos los sectores

El Estado peruano ha fortalecido en los últimos años el trabajo multisectorial para asegurar una mejor atención centrada en las necesidades de las mujeres sobrevivientes de violencia. Durante el evento, autoridades y funcionarios del MIMP y el Minsa reflexionaron sobre estos avances y la importancia de coordinar intersectorialmente.

“Debemos ser socios y trabajar juntos. La violencia produce problemas de salud mental, reduce las capacidades del propio cuerpo para defenderse. Nos hace más vulnerables. En el sector Salud, es considerado uno de los principales determinantes de enfermedad. Por eso, tenemos una responsabilidad importante en la atención y prevención de la violencia contra la mujer, es un tema que nos atañe a todos y estamos comprometidos con ello”, mencionó Humberto Castillo, asesor y representante de la ministra de Salud para el foro.

Complementariamente, Mari Carmen Panizzo, directora general de la Dirección General contra la Violencia de Género del MIMP y Yuri Cutipé, director de Salud Mental del Minsa, aludieron a la voluntad de sus sectores para aplicar los protocolos de actuación conjunta aprobados.

Finalmente, el compromiso del Gobierno de España con la prevención y atención a este problema fue expresado por el embajador de España en el Perú, Ernesto Zulueta, quien anunció que próximamente suscribirá un convenio con el MIMP para apoyar las políticas de prevención de la violencia contra la mujer.

Descarga las presentaciones

• Abordaje de la violencia basada en género desde el sector Salud. Yuri Cutipé, director de Salud Mental del Minsa
• Avances técnicos normativos del MIMP y el Minsa. María del Carmen Panizo, directora de la Dirección General contra la Violencia de Género del MIMP 
• ANIMA y nudos críticos para la implementación de la política nacional contra la violencia hacia la mujer. María Edith Baca, consultora de OPS/OMS
• Paquete de servicios esenciales para mujeres y niñas que sufren violencia. Neus Bernabeu, asesora regional para América Latina y El Caribe en temas de juventud del UNFPA

Fotos: CINU Lima