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Como parte de la formulación del Programa de País 2022 -2026, este miércoles 14 de julio la oficina del UNFPA en Perú, con el liderazgo del Ministerio de Relaciones Exteriores y la Agencia Peruana de Cooperación Internacional, organizó una sesión de consulta con socios estatales estratégicos en la cual participaron 37 representantes de entidades del Gobierno Central y el Poder Judicial.

 

En alineamiento con las prioridades nacionales de desarrollo y enraizado en el Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible (próximo a suscribirse) el Programa de País 2022 – 2026 propuesto aspira a contribuir a que, al año 2030, más mujeres, adolescentes y jóvenes, particularmente de los grupos poblacionales en mayor riesgo de ser dejados atrás, logren el acceso universal a servicios de salud sexual y reproductiva, ejerzan plenamente sus derechos sexuales y reproductivos y el derecho a una vida libre de violencia.

 

Ello se manifestará en el avance hacia el logro de los tres resultados transformadores que buscan acelerar la reducción de muertes maternas evitables, las necesidades insatisfechas de planificación y la violencia basada en género y los matrimonios infantiles y uniones tempranas y forzadas, progresando en la implementación del Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, el Consenso de Montevideo sobre Población y Desarrollo, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, así como cumpliendo con las recomendaciones de órganos de tratado y compromisos internacionales asumidos por el país.

 

Los tres grandes resultados transformadores, que están en el corazón del trabajo del UNFPA, enfrentan mayores desafíos originados por la pandemia de la COVID-19 y en este sentido cobran una vigencia mayor, pues son esenciales en la construcción de un mejor bienestar, prosperidad y paz para todas las personas, sin dejar a nadie atrás.

 

El Programa de País 2022-2026 será el segundo de tres programas consecutivos. Su construcción parte de la apreciación común de país realizada por el Equipo de las Naciones Unidas en el Perú para identificar los desafíos de desarrollo prioritarios que dan pie a la identificación de las áreas estratégicas y los efectos directos del Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible. Asimismo, se basa en la evidencia evaluativa disponible, las oportunidades y lecciones aprendidas de los programas del UNFPA que lo anteceden, y las vinculaciones entre el mandato de la organización y la reducción de la pobreza y la desigualdad, el desarrollo sostenible, la igualdad de género y el pleno ejercicio de los derechos humanos que constituyen el centro del Marco de Cooperación mencionado.

 

Un paso previo a la formulación del Programa propuesta estuvo constituido por el desarrollo de su teoría del cambio, la cual fue presentada y consultada con socios estratégicos estatales, de la sociedad civil, sector privado, la academia y otros actores de la cooperación internacional en un taller de consulta conjunta coorganizado con UNICEF y el PNUD en el mes de mayo de 2021.

 

 

Cifras clave en el Perú

  • La pandemia de la COVID-19 ha hecho retroceder una década los resultados sociales: el producto bruto interno cayó 11.1%, la incidencia de la pobreza monetaria aumentó a 30.1% en 2020 y las desigualdades se exacerbaron aún más en 2020.
  • La mortalidad materna decreció de 265 a 60.7 muertes maternas por 100,000 nacidos vivos entre 1990-1996 y 2016. La COVID-19 revirtió esta trayectoria, incrementándose las muertes maternas en 45.7% en 2020 con respecto a 2019 y más de 65% en 2021 comparado con 2020, lo que implica un retroceso de 16 años. 
  • A pesar de la caída de la fecundidad en adolescentes de 65 en 2015 a 39 por 1,000 mujeres en 2020, cada día 4 niñas menores de 15 años tienen un parto y cada 8 horas una adolescente de 15 a 19 años se convierte en madres.
  • El costo socioeconómico del embarazo y la maternidad adolescentes fue estimado en USD 460 millones en 2019.
  • El uso de métodos anticonceptivos modernos es de 55%, menor al promedio estimado de la región (69.9%) y al de los países vecinos con niveles similares de desarrollo (78%).
  • La proporción de uso de métodos anticonceptivos modernos más baja en el caso de mujeres con menor nivel educativo (36.5%) y quienes se auto-identifican como indígenas (46.3%). Solo la mitad de las mujeres de 12 a 24 años, y una de cada cuatro mujeres en el área rural, usó condón en su primera relación sexual.
  • Cerca de una quinta parte de las mujeres unidas en edad reproductiva no tiene la última palabra en las decisiones de planificación familiar. Por otro lado, más de la mitad de los embarazos ocurridos en los últimos 5 años no fueron planeados, al igual que dos tercios de los embarazos en adolescentes.
  • Los matrimonios infantiles y uniones tempranas afectan a 6.7% de adolescentes con 15-19 años, así como a alrededor de 20% de las mujeres jóvenes que están en el rango de 20-24 años, y a 46% de las mujeres en Loreto.
  • La violencia basada en género no es denunciada en el 70% de casos. Los feminicidios se incrementaron de 84 en 2015 a 129 en 2019; 46% de las víctimas habían denunciado a su agresor.