La pandemia del COVID-19 ha ocasionado un impacto socio- económico devastador.  La violencia de género se ha incrementado y las posibilidades de acceder a justicia, protección y bienestar para quienes son víctimas de diversas formas de violencia, se han complejizado. Adicionalmente, la carga del trabajo doméstico ha recaído con mayor fuerza en las mujeres. Estas situaciones son solo algunos ejemplos del impacto de género de la pandemia, que han determinado la afectación de los derechos de las mujeres y las colocado en situación de mayor vulnerabilidad.

Es claro, entonces, que los roles, mandatos y estereotipos de género han determinado un impacto diferenciado del COVID-19, entre mujeres y hombres.  De acuerdo con estimaciones del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), este impacto podría significar un retroceso de un tercio del avance en materia de prevención de violencia de género, de promoción de la salud materna y de acceso a planificación familiar.

Por ello, es sumamente importante difundir la gravedad del impacto de género de la pandemia y abogar por el diseño de una respuesta pública al COVID-19, que busque atender las necesidades específicas de las mujeres. Se requiere mirar la pandemia con lentes de género a fin de no dejar a ninguna mujer atrás.

La pandemia ha relevado las inequidades, pero también ha establecido oportunidades para promover la igualdad entre los géneros.  El impacto de género del COVID-19 ha revelado la imperiosa necesidad de asegurar la inclusión del enfoque de género en la educación desde los primeros años de formación. La educación con enfoque de género y de derechos humanos es una herramienta esencial para asegurar relaciones equitativas, democráticas y justas, que aseguren el máximo aprovechamiento del potencial de todos y todas. 

Con el presente video buscamos sensibilizar sobre el impacto de género del COVID-19 a fin de asegurar mejores condiciones de vida de las mujeres y un mejor ejercicio de sus derechos en condiciones de igualdad y no discriminación.